20090227

Desierto interior



Marcos 1, 12-13

Encontrar el propio desierto

Reflexionar. Descargarse, desembarazarse de lo que entorpece, de lo que ata. Aceptar hacer una pausa, tener un ¿desierto interior?, un lugar que esté lejos de ruidos superficiales para entrar en uno mismo, para escuchar mejor. Aligerarse por el ayuno, aislarse en el desierto son las condiciones que se nos proponen para ponernos en camino hacia un conocimiento más grande, un descubrimiento nuevo.

Cada quien ha de encontrar su desierto y su ayuno. Nada se detiene durante la Cuaresma: ni la vida familiar, ni el trabajo, ni las preocupaciones, ni las relaciones felices o menos. Las tardes son agotadoras, los fines de semana muy cortos. Hacer un alto, aunque sea en forma muy modesta, es ser llevado por el Espíritu, como lo fue Jesús cuando se retiró al desierto.

Es el signo de una disponibilidad que abre sobre el trabajo de preparación de la que cada uno tiene necesidad para entrar en la inteligencia de la Pascua.
El texto de los cuarenta días de Jesús en el desierto nos muestra cómo Él fue confrontado consigo mismo, a todas las preocupaciones que surgen en el hombre cuando él trata de decidir su relación con Dios.

Lo mismo que para nosotros. Cuando aceptamos poner en nuestra vida un poco de reflexión, y de ayuno, comenzamos a ver las cosas y a experimentarlas de otra manera. El desierto no es forzosamente un lugar de silencio. Es también el lugar en donde se dejan oír murmullos interiores que son habitualmente inaudibles por los ruidos exteriores ordinarios.

Regine du Charlat
Croire Aujord-hui, N° 150 (Marzo de 2003)
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twitter / CruzdeMayo

20090226

¡Que mi ayuno a otros conforte!




Desgarren su corazón y no sus vestiduras.
Joel 2, 12

En la era de la información, donde toda la tecnología disponible nos tiene 24/7 ocupados de atender lo que viene del exterior, hagamos un ayuno que propicie el silencio. No un silencio que nos deje estáticos, sino un silencio que cree un espacio acogedor en nuestro interior para el encuentro con el Señor, un reencuentro con nuestro creador, donde -- en medio de la alegría que comprende todo reencuentro con un ser amado -- podamos conocer y recibir el alimento esencial del cristiano: la voluntad del Padre para cada uno de nosotros.
Padre Carlos Cox,
Rector del Templo Votivo de Maipú,
durante la Misa de Miércoles de Cenizas celebrada en el Santuario de Schoensttat, Bellavista.


twitter / CruzdeMayo

20090224

Reconciliación




Convertirnos quiere decir buscar de nuevo el perdón y la fuerza de Dios en el sacramento de la reconciliación y así volver a empezar siempre, avanzando cada día.
Juan Pablo II


La Confesión explicada por el Papa

twitter / CruzdeMayo

Yo confío en Ti


La Oveja Perdida
de Elvira Vila Massana

Cual oveja descarriada
Huyendo de su Pastor,
Así andaba yo alejada
del camino del Señor.

Pero mi buen Salvador
me miró y me vio perdida
y vino lleno de amor
a salvarme y darme vida.

Con tanto amor me buscó
mi amantísimo Pastor,
que su sangre derramó
por librarme del dolor.

En vez de darme castigo
que mi culpa mereció,
bondadoso y compasivo
en sus hombros me llevó.

Ahora que me ha salvado
y me ha vuelto a su redil,
soy tan feliz a su lado
que le adoro veces mil.

Hasta que en la eterna gloria
siempre le pueda mirar
y cantar la dulce historia
del que me vino a salvar.

Amigo que no eres salvo:
Jesús hoy te busca a tí;
ven pronto, ven a su lado,
que con Él serás feliz.


twitter / CruzdeMayo

20090222

Amistad y Fe


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"Las buenas amistades nos conducen al Señor. Como narra el evangelio en los cuatro que en andas llevan al paralítico. Los amigos de verdad no nos dejan solos, nos aceptan aún con nuestros defectos. Buscan lo mejor para sanarnos y liberarnos. Para esto son capaces de todo, no escatiman fuerzas ni imaginación: "Y como no podían acercarlo a él, a causa de la multitud, levantaron el techo sobre el lugar donde Jesús estaba, y haciendo un agujero descolgaron la camilla con el paralítico". Muchas veces es la fe de los amigos la que actúa en nosotros: "Al ver la fe de esos hombres Jesús le dijo al paralítico: 'Hijo, tus pecados te son perdonados'".
Comentario del Padre Felipe Berrios SJ
Capellán de Un Techo para Chile
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twitter / CruzdeMayo

20090220

Cuaresma y Crisis


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¿¡Ayunar en crisis!?
por Jacques Noyer,
Obispo Emérito de Amiens

¿Habrá que hablar de ayuno durante esta Cuaresma que se avecina? Hablaremos de ello en nuestras iglesias, como cada año, para purificar nuestras almas pecadoras. Pero, ¿qué sentido se debe dar en estos días a este rechazo provisorio a consumir?
¿Es necesario exigir un esfuerzo adicional a tantos hombres y mujeres que, desde hace varios meses ya, viven el alza de los precios y una abstinencia cada vez más estricta?
¿Es juicioso impulsar a una baja del consumo cuando se busca reactivar la maquinaria económica? ¿No sería mejor condenar los reflejos de temor que urgen a economizar frente a un futuro incierto?
Siempre habrá argumentos médicos que justifiquen el ayuno. Está demasiado gordo(a). Come demasiado. Cava su tumba con sus dientes pero también hace un forado en la Seguridad Social. Muchos terapeutas explicarán los beneficios del ayuno prolongado para el organismo y la siquis.
Se podrá decir que al negarse a comer se hará mella en el alza de precios, como se acaba de observar con el petróleo. El precio del trigo bajará si se come menos pan. ¿Ahí los productores tendrán su merecido? ¡Eso es otro tema!
Cuando vemos a Jesús encaminarse al desierto por cuarenta días, se adivina que lo que está en juego con su ayuno es de otro orden. Antes de iniciar su vida pública, antes de salir para anunciar a los hombres la Buena Nueva que trae, se recoge en sí mismo como para tomar impulso. Quiere purificar su corazón de todas las tentaciones que acechan al hombre público. La ilusión de ser todopoderoso, la vanidad de la ostentación, el sobredimensionamiento del ego. Se toma el tiempo para fundar su discurso futuro no eligiendo entre los argumentos de los escribas de la época, sino en ese diálogo secreto con Aquél que él llama su Padre, ese Padre que le hace ser, ese Padre que le hace Dios.
Es ahí sin duda que estamos invitados a unirnos con él. En momentos en que tantas ideas recibidas, tantas evidencias generalizadas, tantas certezas se derrumban, tenemos que ayunar; es decir, guardar silencio en medio de la bullanga mediática; es decir, salir un instante de este ritmo incesante que nos lleva al fracaso; es decir, detenerse un instante en la vida para decidir acerca de nuestra vida. Es entonces tal vez cuando escuchamos la palabra de ese Padre interno que nos llama a vivir y que algunos reconocen como el Padre de Jesús.
Y no se nos exigirá salvar nuestra alma, porque esa sería la mejor manera de perderla. Escucharemos ese envío que nos lleva a arriesgar la vida y al compromiso. Si hay que refundar el capitalismo, si hay que cambiar nuestro modelo de consumo, si hay que salvar el planeta, si hay que aprender a vivir la globalización, no es acaso necesario decir en un momento: « ¡Para! ¡Reflexionemos! ¡Retomemos el control de nuestro destino! »
Para esta Cuaresma, sin duda necesitaremos harto más que cuarenta días. Pero urge comenzar. Refundar nuestra vida colectiva; eso puede comenzar hoy. Callarnos todos juntos para escuchar nuestra vocación de hombre, ¿es imposible?

Texto original en francés publicado por Témoignage Chrétien
Traducción al Español

20090219

Toma tu Cruz y Sígueme...



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¿Como es posible que La Madre Teresa tuviese dudas, períodos de depresión y desolación espiritual?. Chuck Colson tiene una buena respuesta: "Cuando tu luchas con el demonio envuelto en miseria humana, puedes tener una buena razón para deprimirte. Lo se por los años que he trabajado en las cárceles. Hay muchas veces que te preguntas "¿Donde está Dios?". Estar deprimido en esas situaciones demuestra que eres humano. Ser capaz de seguir adelante a pesar de todo demuestra la presencia de la mano de Dios.
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Nueva Evangelización



Altar de la Misión Continental
que reproduce el retablo del Cristo del Envío,
regalo de Benedicto XVI a los Obispos de América Latina y el Caribe.

Explicación del Tríptico

Qué es la Misión Continental

20090218

"¿Quién soy Yo para ti?"




"Para responder, no vayamos a hacerlo con las respuestas sacadas del cuarto de los tiliches que cada uno llevamos dentro; no podremos responder con las lecciones de catecismo aprendidas en la infancia o en la adolescencia, no podemos responder con los clichés que teníamos entre las cosas que no nos sirven para nada. No podemos responder con conocimientos ciertamente deficientes, incompletos y que no tienen repercusión en la vida, lo mismo que muchas de las medallas, escapularios y rosarios que llevamos colgando al cuello, pero que no nos impiden robar, calumniar y despreciar a los más pobres, a los que no pueden defenderse, a los que no tienen voz porque no tienen medios económicos suficientes como nosotros.
La respuesta que Cristo quiere de nosotros tiene que venir desde el fondo del corazón, y tiene que ser dada con toda nuestra vida, con todo nuestro ser, para que pueda engendrar amor, alegría y servicio desinteresado a los que nos rodean. Amor, en una palabra. Y sólo podremos responder efectivamente si amamos, si no tenemos cerrado el corazón a los demás, de otra manera estaríamos haciéndonos tontos, poniéndonos la máscara de creyentes y cristianos, cuando en el fondo el corazón sigue intocable, egoísta, marchito y quizá muerto para los demás. Hoy es el día de descubrir a Cristo como el Salvador y el que puede mover nuestros corazones para ir logrando un mundo mejor, más humano, más cristiano, menos injusto, menos cerrado a los pobres y a los desprotegidos.
Homilia del Padre Alberto Ramírez Mozqueda

Oración por Ema



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Oración de sanación por un niño enfermo
P. José Luis Aguilar

Amado Señor, tú conoces el corazón de tus hijos, y no te quedas indiferente ante el pobre que te suplica. Tú sabes lo que nos aflige el bienestar de nuestros niños, tu comprendes la preocupación de los papás ante la enfermedad de alguno de sus hijos.

Vengo hoy, como el funcionario real del Evangelio, a pedirte que desciendas y sanes a la niña Ema Velasco Saavedra

Aún desde la preocupación que nos causa su enfermedad, desde el dolor y el desconcierto, si esta enfermedad está dentro de lo que Tú permites, aceptamos este momento como ocasión de purificación, de abandono en tus manos, de ofrecimiento generoso de nuestras vidas.

Aceptamos este momento como una ocasión para unirnos desde el sufrimiento a los dolores de Cristo por la salvación del mundo [Colosenses 1, 24] (Tómese unos minutos y, en calma, que su corazón se una a lo que acaba de decir con sus labios: “con este sufrimiento, me uno, Señor, a tu pasión…”)

Ahora, Señor, a ti que quieres que tengamos vida en abundancia, te pido que por el poder del misterio de tu infancia y tu vida oculta en el hogar de Nazaret, sanes a Ema, a quien Tú conoces y amas. Cuida de su cuerpito y de su alma. Pasa tu mano sanadora sobre ella para que sienta Tu alivio, Tus cuidados y se restablezca prontamente, según Tu voluntad.

Tú, que recibiste los amorosos cuidados de María y José, consuela y reanima a su papá y a su mamá; no dejes que caigan en la desesperación, en la duda, en la depresión, sino que desde su dolor y preocupación recurran a Ti como fuente de verdadera, plena, y duradera sanación del cuerpo y del alma.
Te presentamos el lugar donde se encuentra la niña; reviste ese sitio con tu fuerza y gracia. Aleja de allí todo lo que, material o espiritualmente, puedan ser un obstáculo para la pronta recuperación.
Te presentamos los profesionales médicos que atienden a la niña; revístelos con tu sabiduría, ilumínalos para que logren dar con acierto en el diagnóstico y encuentren la medicación y tratamiento indicado. Tómalos como instrumentos de tu sanación.

María, madre de Jesús y madre nuestra, que con esmero y constancia cuidabas de tu niño, mira el corazón de la madre e infúndele confianza, para que también ella, como tu, pueda ver crecer a su hija en estatura, sabiduría y gracia, delante de Dios y de los hombres.

Querido San José, tú que fuiste el protector de la Sagrada Familia, y la defendiste de todos los peligros y hasta de la muerte segura en la persecución de Herodes, te presento al papá de esta criatura; intercede ante tu amado Hijo Jesús, para que logre mantenerse fuerte aún en el dolor y la preocupación. Que logre conseguir los medios necesarios para la buena atención de su hija. Ayúdalo a no decaer y a mantenerse lúcido a la voluntad de Dios.

Señor, tu dijiste que creyéramos que ya hemos obtenido lo que te pedimos con fe en oración, ahora levanto mi voz y mis brazos para darte gracias por la salud que recibirá esta niña por el poder de tu amor que escucha esta oración confiada. Reconocemos que ya estás actuando y sanando. Como el funcionario del Evangelio, nosotros también reconoceremos que es en este mismo momento que estás restableciendo salud y bienestar. Te alabo en fe. Te reconozco Señor y Salvador de nuestras vidas; sin ti estamos perdidos. Te amamos Señor y reconocemos tu grandeza. A ti la gloria por los siglos sin fin.
Amén.

(Padrenuestro, Ave María, Gloria)

Oración

Señor, que yo vea...



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Las palabras de Cristo y de Pablo arrojan una luz particular para el mundo de hoy. Es una situación que se repite. Los sabios y los inteligentes se quedan alejados de la fe, con frecuencia ven con pena a la muchedumbre de los creyentes que reza, que cree en los milagros, que se agrupa alrededor del Padre Pío. Aunque a decir verdad no son todos los doctos, y quizá ni siquiera la mayoría, pero ciertamente es la parte más influyente, que tiene a disposición los micrófonos más potentes, la chatting society, como se dice en inglés, la sociedad que tiene acceso a los grandes medios de comunicación.

Muchos de ellos son personas honestas y sumamente inteligentes y su posición se debe a la formación, al ambiente, a experiencias de vida, y no tanto a una resistencia ante la verdad. Por tanto, no se trata de emitir un juicio sobre estas personas con nombres y apellidos. Yo mismo conozco a algunas de ellas y les tengo una gran estima. Pero esto no debe impedirnos descubrir el núcleo del problema. La cerrazón a toda revelación de lo alto, y por tanto a la fe, no es causada por la inteligencia, sino por el orgullo. Un orgullo particular que consiste en el rechazo de toda dependencia y en la reivindicación de una autonomía absoluta por parte del pensador.

Homilía del Padre Raniero Cantalamessa, OFM Cap.,
predicador de la Casa Pontificia


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20090217

Mala levadura



Caifás (Anthony Quinn)
Jesús de Nazareth, 1977


Actúa como grupo cerrado
Actúa con aires de superioridad
Se motiva por la competencia y el prestigio
Margina a los Pequeños

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20090215

Errantes



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Pero ¿cómo invocarán a aquel en quien no han creído? ¿Cómo creerán en aquel a quien no han oído? ¿Cómo oirán sin que se les predique?

Romanos 10, 14

20090213

Oración penitente



Yo sé que me quieres, señor, porque eres bueno;
Porque tienes un corazón sensible, perdóname.
Limpia mi pecado y levántame de mis caídas.
Me siento pequeño ante Ti, que eres Santo.
Tus ojos han mirado con misericordia
Mi corazón dañado por el pecado.

Tú amas lo profundo y limpio que hay en mí.
Me amas suavemente
Como amigo en el silencio.
Abrázame y tu amor cambiará mi corazón.
Sé mi amigo y caminaré hacia la cumbre.

Devuélveme el gozo y la alegría que perdí;
Deja que mi vida sea como una fiesta.
Olvida Señor, el mal que hice;
Ayúdame a renovarme
Y a perdonar yo también al que me ofende.

Que nazca en mí un corazón puro
Y una voluntad firme.
Quiero ver tu rostro alegre a mi lado
Y tu fuerza que me acompaña.
Dame la alegría de tu Salvación;
Un corazón sincero que opte por ti.

Me pides, Señor, un corazón arrepentido,
Un corazón sincero y noble
Capaz de empezar cada día de nuevo
Perdonando de corazón a los demás
Tal como Tú lo haces conmigo

Fuente

20090212

Misa Tridentina



Foto: Joseph Ratzinger celebrando la Misa

En la historia de la Liturgia hay crecimiento y progreso pero ninguna ruptura. Lo que para las generaciones anteriores era sagrado, también para nosotros permanece sagrado y grande y no puede ser improvisamente totalmente prohibido o incluso perjudicial. Nos hace bien a todos conservar las riquezas que han crecido en la fe y en la oración de la Iglesia y de darles el justo puesto. Obviamente para vivir la plena comunión tampoco los sacerdotes de las Comunidades que siguen el uso antiguo pueden, en principio, excluir la celebración según los libros nuevos. En efecto, no sería coherente con el reconocimiento del valor y de la santidad del nuevo rito la exclusión total del mismo.
Benedicto XVI
Fragmento de la Carta del Santo Padre a los Obispos
que acompaña la Carta Apostólica "MOTU PROPRIO DATA"
cobre el uso de la Liturgia Romana
anterior a la reforma de 1970

Texto completo

Misa Tridentina en Chile

Cómo sanar



Sagrario
de la Capilla de la Virgen de los Rayos de la Medalla Milagrosa
de las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paul
Santiago, Chile



Dador de luy espléndido,
a cuya luz serena,
pasada ya la noche,
el día se repliega.

Mensajero de luz
que de luz centellea,
no es del alba el lucero:
eres tu, Luz de veras,
más brillante que el sol,
todo luy y pureza;
enciende vuestro pecho,
alumbra el alma nuestra.

Ven, Autor de la vida,
prez de la luz paterna,
sin cuya gracia el cuerpo
se sobresalta y tiembla.

A Cristo, rey piadoso,
y al Padre gloria eterna,
y por todos los siglos
al Espíritu sea.
Amén

(UnosMomentos)

20090211

Lourdes




"Santísima Virgen de Lourdes,
que a ninguno desamparas ni desechas,
mírame con ojos de piedad
y alcánzame de tu Hijo perdón de mis pecados
para que con devoto afecto celebre
tu santa e inmaculada Concepción,
en tu milagrosa imagen de Lourdes
y reciba después el galardón de la bienaventuranza
del mismo de quien eres Madre."

Amén

Fuente

20090209

Eluana volvió al Padre



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Infórmate

Al aproximarse a los enfermos y sufrientes, la Iglesia se ve guiada por una visión precisa y completa de la persona humana «creada a imagen de Dios y dotada de dignidad y derechos humanos inalienables» (Ecclesia in Asia, n. 33). En consecuencia, la Iglesia insiste en el principio de que no todo aquello que es técnicamente factible es moralmente admisible. Los recientes y enormes progresos y la capacidad de la ciencia médica nos dan a todos una gran responsabilidad respecto del don de la vida que Dios nos ofrece y que es siempre tal en todas sus condiciones. Debemos estar vigilantes contra cualquier violación y supresión de la vida. «Somos... los custodios de la vida, no los propietarios... Desde el momento de la concepción, la la vida humana involucra la acción creadora de Dios y permanece para siempre en un vínculo especial con el Creador fuente de la vida, y su único fin» (Ecclesia in Asia, n. 35).
Juan Pablo II
Mensaje con motivo de la X Jornada Mundial del Enfermo
11 de febrero de 2002



"Para el tratamiento me inspiraré en el bien de los enfermos, en lo que yo pueda y sepa; jamás en daño suyo ni con mala intención.
A nadie que me pidiere mortífero veneno se lo daré; ni aconsejaré su uso; tampoco administraré abortivo a mujer alguna.
Pura y santamente viviré y ejerceré mi arte."
Juramento Hipocrático, fragmento.

20090206

La Buena Prensa


San Juan Bosco
Fundador de los Salesianos
Patrono de los Editores Católicos



"Un libro puede entrar hasta en las casas en que no entra el sacerdote, y hasta los mismos malos lo toleran como recuerdo o regalo. Cuando se ofrece a sí mismo, no se sonroja, y si se le abandona, no se enfada; enseña la verdad sin prisas si se lee; despreciado, no se queja, sino que suscita el remordimiento aquel que produce deseos de conocer la verdad: él siempre está a punto para enseñarla. A lo mejor se está, cubierto de polvo, sobre el pupitre del estudio o en el anaquel del la biblioteca, y nadie piensa en él; pero, llega la hora de la soledad, del desánimo, del dolor, de la tristeza, o simplemente de la necesidad de distracción o de la angustia por el futuro, y entonces este amigo fiel se sacude el polvo, abre sus páginas ... y se repiten las prodigiosas conversaciones de San Agustín, del beato Colombino y de San Ignacio de Loyola.
Comprensivo con los miedos a causas del respeto humano, se entretiene a solas con ellos sin levantar la menos sospecha; familiarizado con los buenos, está pronto a darles conversarción y a acompañarlos siempre y a todas partes. ¡Cuantas almas se salvaron por los buenos libros; a cuantas preservaron de la corrupción y espolearon al bien!".
Carta de Don Bosco a los Salesianos sobre la difusión de los buenos libros

Fuente

Respeto humano



Herodes Antipas (Christopher Plumer)
Jesús de Nazareth, 1977


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No eres más santo cuando te alaban, ni más vil si te desprecian.
Lo que eres, eso eres: ni se puede decir más de ti de lo que Dios sabe que eres.
Si miras lo que eres dentro de ti, no tendrás cuidado de lo que de fuera hablan de ti.
El hombre ve lo de fuera; Dios el corazón (I Sam 16, 7).
Tomas de Kempis
Imitación de Cristo


Acerca del respeto humano

20090205

Actitud de oración


San Francisco de Asís
El Greco


"Inclinad el oído de vuestro corazón y obedeced a la voz del Hijo de Dios ... pues para esto os ha enviado al mundo entero, para que de palabra y de obra deis testimonio de su voz y hagáis saber a todos que no hay otro omnipotente sino él" (CtaO 4.6.9)

Fuente

El Envío



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El Sacramento de la Eucaristía
(Acerca del Nombre de este Sacramento)
Su riqueza inagotable se expresa mediante los distintos nombres que se le da. Cada uno de ellos evoca alguno de sus aspectos.
Se le llama Santa Misa porque la liturgia en que se realiza el misterio de salvación se termina con el envío de los fieles ("missio") a fin de que cumplan la voluntad de Dios en su vida cotidiana.
Catecismo de la Iglesia Católica, 1322-1332

20090204

La Cruz del Dolor




Infórmate


Oración por un enfermo

Oh, Dios mío,
este enfermo que está aquí, delante de Ti,
ha venido a pedirte
lo que él desea
y que piensa es lo más importante para él.
Tú, oh Dios,
permite que entren en su corazón estas palabras:
¡Es más importante ser sanados del alma!
Señor,
hágase en él Tu santa voluntad en todo.
Si Tú quieres que se sane, dale la salud.
Pero si tu voluntad es diversa,
que continúe llevando su cruz.
Te rogamos también por nosotros, que oramos por él;
purifica nuestros corazones
para que seamos dignos de donar,
a través nuestro,
Tu santa misericordia.
Protégelo y alivia sus penas;
hágase en él Tu santa voluntad.
Que Tu santo nombre sea revelado a través de él;
ayúdalo a él y a sus seres amados a llevar su cruz.

Fuente

El Rosario es el Arma




San Pío de Pietrelcina, gran devoto del Santísimo Rosario

"Pío de Pietrelcina, místico y apóstol"
de Leandro Sáez de Ocáriz
(Fragmento)

Con frase feliz se le llegó a llamar "el devorador insaciable de rosarios". Ciertos devotos le preguntaban poco antes de morir: "¡Padre! ¿Y que es lo que nos podría decir ahora? ¿Qué es lo que nos recomendáis?". Respondía: "¡Amad a la Virgen y hacedla amar! Rezad el rosario; rezadlo siempre. ¡Rezadlo cuantas veces podáis! Es verdad, sí , que Satanás impera en el mundo; pero impera porque otros le dejan imperar. ¿Puede acaso un espíritu dominar de por si a nadie, si no se une a las voluntades libres de los hombres? ¡Quién mucho ora, se salva de seguro!¡Quien poco ora está en peligro de no salvarse y quien no ora nada, ese está en camino de perdición! La oración del rosario es la oración que hace triunfar de todo y a todos. Ella, María, nos lo ha enseñado así, lo mismo que Jesús nos enseñó el padrenuestro.

Cómo rezar el Santo Rosario


Tomad las armas de Dios, para que podáis resistir en el día malo, y después de haber vencido todo, manteneros firmes.
Efesios 6, 13

Renglones torcidos



Infórmate

ORACIÓN POR LOS SACERDOTES
de la Liturgia bizantina

Señor
llena con el don del Espíritu Santo
a los que te has dignado elevar al Orden Sacerdotal
para que sean dignos de presentarse sin reproche ante tu altar,
de anunciar el Evangelio de tu Reino,
de realizar el ministerio de tu palabra de verdad,
de ofrecerte los dones y sacrificios espirituales,
de renovar a tu pueblo mediante el baño de la regeneración;
de manera que vayan al encuentro
de nuestro gran Dios y del Salvador Jesucristo,
tu único Hijo,
y reciban de tu inmensa bondad
la recompensa de una fiel administración de su orden sacerdotal.